Pesillo (Imbabura).- «Han sido años de espera y años de lucha para que ustedes tengan este proyecto», expresó el vicepresidente Jorge Glas, durante la firma de convenio para la construcción del Proyecto Regional de agua potable Pesillo-Imbabura, que se realizó este sábado, 29 de noviembre, y en la que él fue Testigo de Honor.

El proyecto, que tiene un costo de alrededor de 51 millones de dólares, contempla la construcción de un sistema que abastecerá las necesidades de agua potable para pobladores de 162 comunidades rurales y cinco centros urbanos, que comprenden las zonas altas del cantón Cayambe y las zonas nororientales de Pedro Moncayo, Otavalo, Antonio Ante y la suroriental de Ibarra, que suman 250 mil beneficiarios entre Imbabura y Pichincha.

«Este es un día de fiesta. Hoy el proyecto Pesillo-Imbabura es una realidad que ha generado acciones colectivas», indicó el segundo Mandatario, al recordar que los alcaldes de Cayambe, Otavalo, San Miguel de Ibarra, Antonio Ante y Pedro Moncayo se unieron para lograr este convenio, que contempla un préstamo del Banco del Estado por 33.4 millones de dólares y 18.1 millones de dólares que es cubierto por las cinco alcaldías.

«Esta ha sido la revolución que ha devuelto los derechos a los ecuatorianos», mencionó Glas, al tiempo que recordó que los habitantes de Imbabura esperaron esta obra por 18 años.

Por su parte, Juan Serrano, presidente de las Juntas Regionales de Agua Potable del proyecto Pesillo, resaltó la importancia de obra y aseguró: «esto es la Revolución Ciudadana, son obras que están dando y a las cuales también dan seguimiento», dijo.